El Gobierno de Colombia, representado por su canciller Laura Sarabia, abogó este lunes aquí a favor de los migrantes, durante su participación en el 58 Periodo de Sesiones del Consejo de Derechos Humanos de las Naciones Unidas.
Sentenció que "ninguna es ilegal por querer instalarse en un territorio diferente al suyo", y remarcó que "en todos los rincones del mundo el trato a los migrantes se debe regir por los estándares internacionales de derechos humanos".
También expuso la ministra el ejemplo de Colombia en materia migratoria, afirmando que, a pesar de los múltiples desafíos, el país sudamericano opta por diseñar una política de integración, regulación e inclusión de la población migrante.
La base del éxito de dicha política, apuntó, consiste en "reconocer que estos tienen dignidad y que sus derechos humanos deben ser irrestrictamente respetados, sin importar su situación legal".
A modo de conclusión, la canciller manifestó que Colombia buscará que el consejo reconozca que la protección de los derechos humanos de las poblaciones más vulnerables y marginadas "está ligada a medidas eficaces de mitigación y adaptación, que deben garantizar tanto la justicia climática como la dignidad humana".
Colombia, como miembro de la Asamblea General desde enero de 2025 y por los siguientes tres años, hará parte de las deliberaciones y debates más importantes a nivel mundial en materia de derechos humanos, y deberá participar activamente en los periodos ordinarios y en las sesiones especiales que se convoquen.
