Un hombre que respondía al nombre de Yofre José Morán García, de 49 años de edad, padre de dos hijos y de profesión universitaria, falleció en la Emergencia del Hospital Central de Maracay, víctima de varias heridas causadas con un arma blanca.
De acuerdo a la información que se maneja de manera extraoficial, al ciudadano le habrían apreciado entre 30 y 34 puñaladas a nivel del cuello y cara.
Y el móvil del homicidio como tal se desconoce oficialmente, pero se sospecha de un posible drama pasional o sino robo, esto sin descartar otras teorías.
Sin embargo, ambas hipótesis, las cuales cobran fuerza, están bajo investigación de las autoridades del Cuerpo de Investigaciones Científicas, Penales y Criminalísticas, adscritas a la Delegación Municipal Caña de Azúcar.
Se resalta que el hecho de sangre sucedió durante la madrugada del martes 9 julio en la calle Páez del sector La Candelaria del municipio Mario Briceño Iragorry, en Aragua.
El suceso
Según la presunción que se tiene es que Morán y el sujeto, comenzaron a conversar temas de su interés en plena vía pública y en medio de la tertulia, empezaron a revisar un celular, se dijo a los periodistas.
Poco después el extraño visitante, identificado con el alias de «Alan», habría leído algunos mensajes de texto en el celular de la víctima e inmediatamente se originó entre ellos una fuerte discusión.
Al parecer, Morán García, quien era un profesional del derecho, egresado de la Universidad Bicentenaria de Aragua y actualmente se desempeñaba como asistente personal en uno de los despachos del Ministerio del Poder Popular para las Relaciones de Interior, Justicia y Paz, fue atacado a puñaladas.
Minutos después los vecinos que presenciaron los hechos, notificaron del suceso de los familiares del jurista, quien fue trasladado con la urgencia del caso hasta el Hospital Central de Maracay.
Horas más tarde las autoridades médicas declararon al hombre muerto e inmediatamente se dio parte del asunto a los investigadores del Cicpc, adscritos a la Coordinación de los Delitos Contra las Personas.
Aunque se conoce con el apodo de «Alan», se desconoce la identidad del presunto homicida, y a través de las investigaciones que adelantan los sabuesos del Cicpc, se logrará su identificación.
Actualmente el agresor anda huyendo con rumbo desconocido. Sin embargo, los mejores investigadores realizan una serie de diligencias y toman declaraciones para elaborar el retrato hablado del victimario.
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