Llegados al primer semestre del año, los vendedores de carnes rojas del Mercado Libre de Maracay se mostraron preocupados por el estancamiento de las ventas, ya que medidas recientes como la Ley de Pensiones no ayudan a aumentar el poder adquisitivo de las personas.
Los carniceros manejan cifras de hasta 60% de disminución de las ventas en el primer semestre de 2024, y esperan que el panorama nacional se aclare pronto y puedan levantar las ventas para mantener sus negocios a flote.
Con sus variaciones, el kilo de carne roja de primera se mueve en torno a los 280 bolívares, mientras que la carne de segunda se ubica aproximadamente en 260. Otros cortes como costillas, a 180 bolívares, siempre dependiendo de distintos factores, especialmente los proveedores, quienes establecen los niveles de inflación.
En este orden de ideas, José Flores, vendedor del Mercado Libre, comentó que se trata de un tema amplio de abordar, ya que en cuanto a la afluencia de clientes y las ventas se mantiene un estancamiento, atribuyéndolo al bajo poder adquisitivo de su clientela.
Otro aspecto a abordar es el aumento de los costos, que afortunadamente tiene un mes estabilizados desde hace un mes debido a la calma del mercado cambiario.
«Tenemos más o menos como un mes que se ha estabilizado el dólar, no ha aumentado ni ha bajado; está más o menos al mismo precio. Mientras que el dólar se mantenga, así lo tenemos nosotros», destacó José Flores.
Pero esto no es un indicativo de mejoría, porque el principal problema al que los vendedores se enfrentan es la apatía de los clientes, que no van con la misma frecuencia a comprar. Esto es clave, ya que independientemente de las leyes que se han puesto en vigencia últimamente, los ciudadanos siguen devengando los mismos sueldos.s
«Las ventas han bajado una barbaridad, yo pienso que 60% en comparación con los años anteriores», precisó Flores.Algunos trabajadores de carnicerías hicieron especial énfasis en que los abuelos son los clientes fijos de la mayoría de los negocios, lo que depende a su vez de los beneficios recibidos del gobierno para hacer su mercado de carnes.
Tomando en cuenta esto, Carlos Silva, también comerciante, aseveró que a los adultos mayores las pensiones y demás beneficios no les alcanzan para ir a comprar comida, por tanto, recalcó que «las ventas han estado muy malas porque la gente no tiene efectivo para comprar, las pensiones todavía están en 130 bolívares y con eso no se compra ni siquiera dos paquetes de harina».
Ante todo esto, los pronósticos para el futuro no se ven prometedores, ya que se acerca la temporada de vacaciones y esa no es una buena época para la venta de este rubro, ya que los padres o madres de familia compran menos comida cuando sus hijos se encuentran en casa o deciden salir de vacaciones.
ALEJANDRA BUITRAGO | elsiglo
