Hasina, hija del ‘padre fundador’ de Bangladés, Sheikh Mujibur Rahman, había iniciado en enero de este año su quinto período al frente del Ejecutivo bangladesí tras una victoria aplastante de su partido, la Liga Awami, en las elecciones generales del 7 de enero, en las que la fuerza de Hasina obtuvo 223 de los 299 escaños en juego.
Finalmente, las protestas -inicialmente pacíficas- de estudiantes en universidades de Daca y otras ciudades del país que desembocaron en una oleada de violencia que se saldó con casi 300 muertos, acabaron con el liderazgo de Hasina tras tres mandatos seguidos en el poder desde 2008 (ya había gobernado por primera vez entre 1996 y 2001).
La trayectoria de la exprimera ministra estuvo marcada inicialmente por el asesinato de su padre en 1975 durante un golpe de Estado en el que fue eliminada buena parte de su familia.