El Real Madrid ganó su cuarta Intercontinental (1960, 1998, 2002 y 2024) este miércoles en Lusail en un partido en el que abrió el marcador la conexión entre Vinícius Junior, celebrando su premio ‘The Best’ que recibió el martes, y la vuelta de Mbappé tras acortar plazos de una leve lesión muscular fueron determinantes para sacar adelante la final.
En un partido sin mucho ritmo, el conjunto blanco impuso su calidad individual para superar al Pachuca mexicano (3-0) y ganar su segundo título del curso, tras la Supercopa de Europa ante la Atalanta.
Ambos encuentros con un factor común: Mbappé como goleador.